RESEÑA → A LA CAZA DEL PRÍNCIPE DRÁCULA, KERRI MANISCALCO

RESEÑA → A LA CAZA DEL PRÍNCIPE DRÁCULA, KERRI MANISCALCO

Ficha técnica:

Título: A la caza del príncipe Drácula.

Autor: Kerri Maniscalco

Género: Thiller, suspense, juvenil.

Año de publicación: Septiembre 2019

Editorial: Puck editorial.

Saga: 2/??

Número de páginas: 480

PVP: 17,00 € 

 Sinopsis: 

En la esperada secuela del best seller «A la caza de Jack el Destripador», se descubren extraños asesinatos en el castillo del Príncipe Vlad el Empalador, también conocido como Drácula. ¿Podría ser un simple farsante quien está cometiendo los crímenes... o el príncipe ha vuelto a la vida?

Tras el dolor y el horror que le ha causado descubrir la verdadera identidad de Jack el Destripador, Audrey Rose Wadsworth no tiene otra opción más que huir de Londres y de sus recuerdos junto con el arrogante y encantador Thomas Cresswell.

Rose viaja al corazón oscuro de Rumania, hogar de una de las mejores escuelas de medicina forense de Europa... y de otro asesino de renombre: Vlad el Empalador, cuya sed de sangre se convirtió en leyenda.

Pero el sueño de la vida de Rose, pronto se ve frustrado por los sangrientos descubrimientos en los pasillos del imponente castillo de la escuela, y se ve obligada a investigar asesinatos que le resultan extrañamente familiares. Quizás, lo que encuentre despierte sus temores más profundos.

Opinión personal:

En “A la caza del príncipe Drácula” Audrey Rose, la intrépida estudiante forense tomará el tren rumbo a Transilvania para estudiar en la Academia de Medicina y Estudios Forenses más prestigiosa de Rumania. Ubicada en lo alto de una montaña, la academia se encuentra dentro del castillo que pertenecía a Vlad III, un príncipe rumano que dio origen a la leyenda del vampiro Drácula.

Así, siguiendo la secuela de "A la caza de Jack el destripador", la autora  Kerri Maniscalco nos muestra a una protagonista traumatizada por los acontecimientos del primer libro. Sin embargo, la fuerza y perspicacia de Audrey Rose la harán cada vez más astuta e inteligente en sus investigaciones al continuar sus estudios. En "Príncipe Drácula", la joven aún enfrentará prejuicios por ser una mujer que se atreve a desafiar el ambiente masculino de la academia.

Al principio, aludiendo a la autora Agatha Christie, comenzamos la trama con Audrey y su compañero de investigaciones, Thomas, dentro del Orient Express, en dirección a una de las mejores academias forenses, ubicada en el castillo que pertenecía al sediento de sangre Vlad III, conocido como "Vlad el Empalador". En la historia real, Vlad III fue un príncipe rumano recordado por sus muertes extremadamente crueles. Su apellido era Dracuela, que significa algo cercano a "hijo del dragón", por lo que se hizo conocido como Drácula. Además, fue la inspiración para el escritor irlandés Bram Stoker para lanzar, en 1897, "Drácula".

Sin embargo, como costumbre de la autora, hay varios elementos de la historia real que se mezclan con la libertad creativa para la composición de la trama. Por ejemplo, vemos detalles en el libro sobre la orden religiosa de la familia Vlad (conocida como la "Orden del Dragón") que realmente existió, con Vlad III y su padre, Vlad II, como miembros. Justo después del final de la historia, hay una parte en la que la autora cuenta cómo fue el proceso de mezclar estos hechos reales con la narrativa del "Príncipe Drácula".

Volviendo a la historia, Audrey y Thomas viajan a Rumania en el municipio de Brașov, con el único propósito de mejorar el conocimiento forense en la academia, pero lo que ambos no esperan es que durante el viaje aparezca misteriosamente un cadáver con el corazón perforado Entretanto, como Audrey aún no se ha recuperado por completo del trauma del caso Jack el Destripador, vemos a un personaje con salud mental totalmente desabrido. De esta manera, tendrá que enfrentar este trauma para continuar con sus autopsias.

Este rastro de sangre continuará extendiéndose a lo largo de la trayectoria de Audrey y Thomas en la academia forense. Los cuerpos perforados y con  la sangre drenada aparecen en la región. ¿Pueden Audrey y Thomas resolver este caso por su cuenta? Además, los rumores comienzan a difundirse en los periódicos: ¿volvería el verdadero príncipe Drácula para atormentar a la población? ¿Quién sería responsable de desencadenar esta nueva ola de asesinatos?

La era victoriana estuvo marcada por el conservadurismo de la sociedad y la imposición de comportamientos rígidos y moralistas. ¿Y quién perdió más al respecto? Las mujeres, por supuesto. Su papel fue asignado al cuidado de la familia y el hogar. Pero en el Príncipe Drácula, Audrey Rose está lejos de ser entretenida solo con bordados. La joven quiere manejar su bisturí sin preocuparse por ensuciarse los vestidos, abrir cuerpos y estudiar cada parte del cuerpo humano.

Sin embargo, debido a que es la primera mujer en formar parte de esta academia, cuando llega a la escena, despierta varias miradas desagradables y el director la recibe con desdén y hostilidad. Sus compañeros ya ven su presencia como una invasión de su territorio. Sin embargo, Audrey no estará quieta ante estas barreras. Luchará contra el machismo y demostrará que es tan capaz como cualquier hombre en esa academia.

El ambiente gótico del libro es otro detalle que merece atención. Hay varios pasajes que se refieren al castillo encantado de Vlad, así como escenas cargadas de tensión que tienen lugar en el bosque circundante. Dado que la región del castillo esta en lo alto de la montaña, tenemos descripciones del viento y de las noches frías y ruidosas. Además, hay una sensación constante de que Audrey y Thomas están siendo observados y el misterio de los asesinatos encaja con el misterio del castillo encantado.

Además, es de apreciar la edición del libro ya que a lo largo del libro podemos observar  imágenes y fotos del verdadero castillo de Vlad, de los instrumentos forenses utilizados en el pasado, así como fotos antiguas de salas de autopsias. Como la autora estudió Ciencia y Criminología para profundizar su pasión por la medicina forense,  había un cuidado en retratar lo que realmente era el entorno presentado en el libro, lo que contribuyó significativamente a la experiencia de lectura.

Con respecto al romance entre Audrey y Thomas, ya sabemos que ambos tienen mucha química. Por lo tanto, en "Príncipe Drácula" el desarrollo de esta relación continúa. Thomas es una persona progresista para el hombre de su época. No se siente "amenazado" por la inteligencia de Audrey y no se incomoda al ser salvado varias veces por ella. ¿Una mujer que estudia en una academia llena de hombres? Lo que sería considerado como una aptitud subversiva e inadecuada para una dama de su época, es visto con cierta naturalidad por Thomas. Sin embargo, no todo son flores.

Si bien Thomas está preocupado por la salud mental de Audrey, el personaje actúa de manera paternalista, pero Audrey es directa al afirmar que no quiere que ningún hombre controle su libertad. Por lo tanto, ese pasaje podría haber sido romantizado por otros autores. Sin embargo, la autora muestra que el personaje no necesita ningún hombre para tomar decisiones por ella, alegando que Audrey puede cuidarse sola. Al mismo tiempo, es interesante ver que el personaje no es perfecto y que Thomas tiene rastros del machismo de la época.

Aunque su tensión sexual se prolonga innecesariamente durante la trama del "Príncipe Drácula", Audrey y Thomas siguen siendo un dúo cautivador. Además de los desacuerdos que componen los flirteos sarcásticos e inteligentes de la pareja, en este libro, ambos comienzan a revelar los sentimientos y deseos del otro, creando una mayor reciprocidad en la construcción de la pareja.

En "Príncipe Drácula" tenemos una variedad de personajes femeninos que ayudarán a Audrey y Thomas a desentrañar la identidad del misterioso asesino. Comenzando con Anastasia, la carismática hija del director de la academia; pasando por Daciana, la hermana de Thomas; y por último, Ileana, una de las criadas del castillo.

A través del intercambio de cartas con su prima, vemos cuánto  extraña Audrey a una amiga presente y convivir con otras mujeres, por lo que esta vez tendrá la oportunidad de entablar nuevas amistades con estas mujeres que, aunque son diferentes entre sí,  se van a solidarizar con nuestra protagonista y aliarse en la captura del asesino. Saliendo un poco de los arcos de Audrey y Thomas, estos nuevos personajes se destacan y aportan una mayor diversidad a la obra.

Transgrediendo una vez más a las costumbres de la época victoriana, la autora todavía deja espacio para la construcción de una relación LGBTQ en el "Príncipe Drácula". ¿Y lo mejor de todo? No tiene un final trágico. Incluso esta relación está tan bien construida que forma parte de una importante revelación de la trama. Por lo tanto, la autora muestra que hay otros personajes además de Audrey que también luchan y resisten las costumbres conservadoras de la época.

La narrativa de Kerri Maniscalco sigue siendo adictiva. Hay nuevas transgresiones de las costumbres, con la diversidad de nuevos personajes bien construidos y giros notables. Hasta ahora, la serie “a la caza de” es una lectura perfecta para a los que les gusta las historias de asesinos en serie, con un ambiente gótico y una protagonista que mantiene afilado tanto su bisturí como su opinión.